¿Llevo a los niños al cementerio?
10/31/2022

En nuestra cultura de tradición católica el día 1 de noviembre, día de Todos los Santos, y  del 2 de noviembre, día de Todos los Fieles Difuntos, algunas familias recordamos a nuestros seres queridos acercándonos a los cementerios donde éstos han sido enterrados. 

Es una fiesta que, seamos religiosos o no, muchas personas conmemoramos a nuestros seres queridos fallecidos con nuestro particular ritual de homenaje, siendo respetable cualquier opción de recuerdo elegida.

En estas fechas, ante la pregunta que se hacen muchas familias de si llevar a los niños al cementerio, podemos encontrarnos ante tres escenarios distintos:

  • Que el niño no haya ido nunca al cementerio y que no sepa de qué estamos hablando
  • Que el niños tenga una idea de lo que es el cementerio porque lo ha visto en la tele o en los dibujos animados
  • Que el niño ya haya visitado antes un cementerio y que quiera volver o no.

 

Ante esta pregunta cuentos quiero daros unas pautas sobre cómo abordar la primera visita de un niño al cementerio:

  • En primer lugar les debemos informar de que nosotros vamos a ir al cementerio y a continuación preguntarles si quieren acompañarnos.
  • Es importante que antes de ir les expliquemos qué es un cementerio y qué van a ver ya que seguro que no va a ser como el que han podido ver en los cuentos, con brujas, pájaros que levantan el vuelo y nos asustan, o con cuerpos que salen del suelo….  Hemos de explicarles que van a ver: nichos, tumbas, lápidas con inscripciones, adornos florales, cruces,… a la vez que también podemos encontrarnos con personas llorando, limpiando una lápida, un cristal, plantando flores, rezando,…  Porque anticipándoles toda esta información  les ayudaremos a manejar o disminuir la ansiedad que les pueda generar.
  • También es bueno explicarles por qué queremos ir nosotros y qué vamos a hacer. Si vamos a rezar una oración junto a la tumba, o a expresar unas palabras de recuerdo y de cariño, a poner una música que le gustaba a nuestro ser querido, a dejar una foto,…. A la vez que es bueno darles la posibilidad de que ellos hagan algún dibujo, alguna manualidad, un escrito, o si les apetece de cantarles una canción,….
  • También es necesario darles un espacio para que ellos hagan sus propias preguntas y contestarlas con la mayor dosis de realidad y concreción posible, a la vez tenéis que utilizar palabras sencillas que puedan ellos entender según su edad.
  • Y finalmente, es muy importante darle al pequeño la libertad de elegir si quiere o no quiere acompañarnos al cementerio. Nunca debemos forzarlos ni mucho menos chantajearlos con frases como “a la abuela le gustaría que fueras a verla”. Hemos de respetar al niño igual que respetamos a otros familiares adultos en su deseo de no ir.
  • Y si una vez en el cementerio el niño se sintiera incómodo y deseara marcharse de allí, debemos normalizar su necesidad no haciéndolo sentir incómodo por ello y dar por finalizada su visita acompañándolo fuera del cementerio.

Es cierto que los cementerios no son lugares alegres, pero tampoco son lugares tenebrosos como a veces los pintan en las películas, libros o dibujos animados. Por ello es importante transmitirles lo que significa para nosotros esa visita y cuál es nuestra particular manera de recordar y homenajear a nuestro ser querido allí enterrado.

Si tienes alguna duda sobre cómo acompañar a los más pequeños de la casa en estas situaciones, me pongo a tu disposición para poder ayudarte a que gestionéis mejor todos juntos estas situaciones.

 

Médico terapeuta
en pérdidas y duelo provocadas
por enfermedad o muerte.

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